En el trabajo...
Hello, doctor, this is your Spanish interpreter. May I have the name of the person we're trying to reach?
Hi, there! We're trying to reach Mario.
What is this in regards to?
His boyfriend.
Pardon me? His boyfriend? (WTF?!?!).
Yes.
Oh, OK (who am I to judge?).
[El mae contesta]
Sí buenas, estamos buscando al señor Mario de parte del consultorio del doctor...
Sí, soy yo.
¡Hola, señor Mario! Soy el intérprete y le voy a ayudar en la comunicación con el doctor. Lo estamos llamando con respecto a su novio.
¿Qué?... ¡¿mi novio!?
What?... my boyfriend?!
What?!
¡¿Qué!?
Mire, señor, yo creo que usted está equivocado, yo no tengo ningún novio.
I do apologise... [me interrumpe el doctor]
It's not his boyfriend, interpreter, it's "his wolfrem", the medicine for the X (sorry, pero es que no me acuerdo para qué era la medicina ni cómo se escribía el nombre).
Y luego dicen que estoy de ser tolerante solo trae buenas recompensas...
viernes, 31 de julio de 2009
martes, 28 de julio de 2009
Solo me queda cantar...
A raíz del comentario anterior, he estado pensando un poco y ya después me di cuenta que la verdad lo mejor en tales casos es reírse de uno mismo.
Así que, como dice la canción:
PD: Intenté buscar el video original pero por derechos de autor no estaba disponible para Costa Rica en YouTube. Me conformé con esta versión dado que al menos el chiquillo hace gracia.
Así que, como dice la canción:
Ya no me quedan más lágrimas
Solo me queda cantar:
PD: Intenté buscar el video original pero por derechos de autor no estaba disponible para Costa Rica en YouTube. Me conformé con esta versión dado que al menos el chiquillo hace gracia.
domingo, 26 de julio de 2009
Bandera blanca
Es gracioso cómo muchas veces uno oye las cosas pero nunca les pone atención. Resulta que hoy venía en el bus del trabajo y salió la canción White Flag de Dido. Por algún motivo que aún no logro descifrar, le puse cuidado y me llegó terriblemente.
Será porque uno cuando anda sensible se vuelve más perceptivo...
Y pues nada, que me entró la culiolada. En realidad he tenido la comemierda desde hace unos días. Entonces le quiero dedicar esta canción a una persona que ha jugado un rol que a lo mejor no le corresponde, que nunca pidió tal distinción y que es probable que no le interese.
A ella le digo que sigo pensando que todo fue mi culpa, que yo la cagué y que lo siento. Si vale de algo, gracias a esta experiencia logré aprender mucho y sobre todo conocer que nunca debo cometer los mismos errores que cometí cuando intentamos estar juntos. Sin embargo, no puedo sino arrepentirme de haberme equivocado con alguien que creo que vale en paleta.
Tengo una dicotomía por dentro: por un lado, mi corazón todavía se emociona al encontrarnos y añora con fuerza un nuevo afán; por el otro, mi cerebro me dice que es mejor olvidando y tratar de no intentarlo de nuevo. Me decanto por la segunda porque opino que es lo más prudente y de paso me serviría para no salir lastimado otra vez.
Curiosamente el otro día hablaba con un amigo y éste me decía que por qué no me lanzaba de nuevo a estas aguas. Pero es que no sé ni lo que siento, me gusta pero al mismo tiempo no; aparte que la verdad le tengo vergüenza desde que pasó lo que pasó. Además, percibo un cierto grado de indiferencia de su parte (aunque en esto del amor a veces el desdén viene a ocultar el deseo de no apocar las labores de conquista).
Será porque uno cuando anda sensible se vuelve más perceptivo...
Y pues nada, que me entró la culiolada. En realidad he tenido la comemierda desde hace unos días. Entonces le quiero dedicar esta canción a una persona que ha jugado un rol que a lo mejor no le corresponde, que nunca pidió tal distinción y que es probable que no le interese.
A ella le digo que sigo pensando que todo fue mi culpa, que yo la cagué y que lo siento. Si vale de algo, gracias a esta experiencia logré aprender mucho y sobre todo conocer que nunca debo cometer los mismos errores que cometí cuando intentamos estar juntos. Sin embargo, no puedo sino arrepentirme de haberme equivocado con alguien que creo que vale en paleta.
I know I left too much mess and
destruction to come back again
And I caused nothing but trouble
I understand if you can't talk to me again
And if you live by the rules of "it's over"
then I'm sure that that makes sense
Tengo una dicotomía por dentro: por un lado, mi corazón todavía se emociona al encontrarnos y añora con fuerza un nuevo afán; por el otro, mi cerebro me dice que es mejor olvidando y tratar de no intentarlo de nuevo. Me decanto por la segunda porque opino que es lo más prudente y de paso me serviría para no salir lastimado otra vez.
Curiosamente el otro día hablaba con un amigo y éste me decía que por qué no me lanzaba de nuevo a estas aguas. Pero es que no sé ni lo que siento, me gusta pero al mismo tiempo no; aparte que la verdad le tengo vergüenza desde que pasó lo que pasó. Además, percibo un cierto grado de indiferencia de su parte (aunque en esto del amor a veces el desdén viene a ocultar el deseo de no apocar las labores de conquista).
And when we meet
Which I'm sure we will
All that was there
Will be there still
I'll let it pass
And hold my tongue
And you will think
That I've moved on....
viernes, 24 de julio de 2009
¡Te amo, Jackeline McLean!
Por lo general yo soy el mae más gordofóbico de la vida. Cuando veo gente con sobrepeso me dan ganas de volverme anoréxico, sobre todo si estoy en un restaurante.
Por eso me sorprendió tanto haber visto a Jackeline McLean y haberme maravillado con su sexi movimiento.
Y como la vergüenza es algo que perdí hace mucho tiempo, los dejo con este pedazo de mujer que además de ser hilarante, sorprende por su agilidad a la hora del baile.
¡Disfruten!
PD: Es la de jeans y la de dorado (o lo que es lo mismo, la que baila de segunda y cuarta).
Por eso me sorprendió tanto haber visto a Jackeline McLean y haberme maravillado con su sexi movimiento.
Y como la vergüenza es algo que perdí hace mucho tiempo, los dejo con este pedazo de mujer que además de ser hilarante, sorprende por su agilidad a la hora del baile.
¡Disfruten!
PD: Es la de jeans y la de dorado (o lo que es lo mismo, la que baila de segunda y cuarta).
jueves, 23 de julio de 2009
¡Pipipipipipirí, Fenomenoide, Fenomenoide!
Hay veces que yo me siento como con un vacío por dentro...
El que está pero siempre está ausente...
El que ríe pero que no está feliz...
El que se hace a un lado en su afán por ser aceptado por los demás...
El que sabe que no todo es raciocinio pero que igual intenta descifrar su existencia a punta de intelecto...
El que no tiene un lugar en el mundo y que está solo pese a tener gente a su alrededor...
El que no ha hecho sino desperdiciar las oportunidades que le ha dado la vida...
El que quiere ser frío como Bree Hodge pese a que sabe que ese camino lleva al bloqueo de sus sentimientos. Y es que ese es el problema. Me he dado a la tarea de dejar a un lado el sentir porque me da cólera (o miedo, o angustia, o tristeza) descubrir lo que llevo por dentro y que a lo mejor no me pueda gustar. Me he alejado de la gente (o no sé si más bien se hayan alejado ellos de mí) porque tengo una tendencia a ser sumamente absorbente en primera instancia para luego con la mínima señal de rechazo apartarme porque no quiero ser una "carga" para nadie.
El otro día hablaba con una muchacha que estudió psicología. Le comentaba que una de las críticas que más se me endilgan es la de ser loco. Creo que he llegado a tragarme el cuento porque a veces lo siento así. Me replicó que estaba bien que lo estuviera siempre y cuando no me afectara en la vida cotidiana. La verdad no lo hace mas sí es un asunto de al menos una vez al mes.
Hoy leía varios blogs que me encontré por ahí y me di cuenta que casi todos tenían algo importante que contar. El mío, por su parte, no tiene nada interesante; tanto así que casi ni visitantes tiene. Y es que sinceramente no contiene nada lo suficientemente relevante como para que valga la pena pasarse por acá de vez en cuando. O quizás no pueda definirse a través de un público meta que le dé seguimiento. Digo, porque si tuviera una temática algo así escandalosa como "penicidio", "gay", "zoofilia" o "cienciología" los clics se dispararían a 1000%. Tal vez podría empezar a inventar relatos eróticos y hacer esto como un tipo de "Diarios de una Prostituta", ¡yo qué sé!
Bueno, chauu.
El que está pero siempre está ausente...
El que ríe pero que no está feliz...
El que se hace a un lado en su afán por ser aceptado por los demás...
El que sabe que no todo es raciocinio pero que igual intenta descifrar su existencia a punta de intelecto...
El que no tiene un lugar en el mundo y que está solo pese a tener gente a su alrededor...
El que no ha hecho sino desperdiciar las oportunidades que le ha dado la vida...
El que quiere ser frío como Bree Hodge pese a que sabe que ese camino lleva al bloqueo de sus sentimientos. Y es que ese es el problema. Me he dado a la tarea de dejar a un lado el sentir porque me da cólera (o miedo, o angustia, o tristeza) descubrir lo que llevo por dentro y que a lo mejor no me pueda gustar. Me he alejado de la gente (o no sé si más bien se hayan alejado ellos de mí) porque tengo una tendencia a ser sumamente absorbente en primera instancia para luego con la mínima señal de rechazo apartarme porque no quiero ser una "carga" para nadie.
El otro día hablaba con una muchacha que estudió psicología. Le comentaba que una de las críticas que más se me endilgan es la de ser loco. Creo que he llegado a tragarme el cuento porque a veces lo siento así. Me replicó que estaba bien que lo estuviera siempre y cuando no me afectara en la vida cotidiana. La verdad no lo hace mas sí es un asunto de al menos una vez al mes.
Hoy leía varios blogs que me encontré por ahí y me di cuenta que casi todos tenían algo importante que contar. El mío, por su parte, no tiene nada interesante; tanto así que casi ni visitantes tiene. Y es que sinceramente no contiene nada lo suficientemente relevante como para que valga la pena pasarse por acá de vez en cuando. O quizás no pueda definirse a través de un público meta que le dé seguimiento. Digo, porque si tuviera una temática algo así escandalosa como "penicidio", "gay", "zoofilia" o "cienciología" los clics se dispararían a 1000%. Tal vez podría empezar a inventar relatos eróticos y hacer esto como un tipo de "Diarios de una Prostituta", ¡yo qué sé!
Bueno, chauu.
domingo, 19 de julio de 2009
Meme
Al igual que quien me nominó, me dispongo a realizar esta entrada. No sé muy bien de qué va la cosa, vamos a ver cómo me va.
Libro: El Secreto de Rhonda Byrne.
Los nominados son: Tico Social, Mujer de Maíz, Fortachón, eunicebs y juan.pablo.
Libro: El Secreto de Rhonda Byrne.
Todo es energía, voy a ayudarte a entender un poco de mejor. Está el Universo, nuestra galaxia, nuestro planeta, las personas y dentro de este cuerpo tenemos los sistemas de órganos, las células, las moléculas y los átomos. Luego, solo hay energía. Podemos verlo de distintas formas pero en esencia todo es energía.
Los nominados son: Tico Social, Mujer de Maíz, Fortachón, eunicebs y juan.pablo.
Para hacerlo
- Tomen el libro más cercano.
- Abrirlo en la página 161.
- Copiar la quinta frase.
- Nominar 5 blogs.
- Poner una imagen referente al tema.
viernes, 17 de julio de 2009
Apuntes sobre escatología y sobre yoga
Ayer fue un día bastante peculiar. Desde el momento en que me subí al autobús sucedió un montón de cosas del que en realidad no me percaté sino hasta al final del viaje. Resultó que apenas se montó en el vehículo, un carajillo botó el rancho en medio pasillo.
Yo, por mi parte y como siempre, llegué como desesperado buscando un lugar con tal de no irme de pie. Obviamente, ni me percaté del tema y me senté en el primer asiento disponible (lamento desilusionarlos, pero no me senté en la regurgitación ni en sus cercanías). Pasaron los minutos y yo como si nada. De repente, percibí un olor a rancio pero no le presté importancia dado que cuando uno pasa mucho tiempo en el transporte público su nariz se vuelve inmune a los tufos de procedencia desconocida.
Fue gracias al delirio de confite Frutini de una señora que me di cuenta de lo que acontecía. Bueno, a eso y a que dijo: "Fulanita, cuidado se para en el papel que está en el pasillo". Más claro ni el agua.
Pues bueno, en este entonces faltaban 3 paradas para llegar a mi destino (lo cual, en términos del autobús de Palmares no significa ni 2 km) y no encontré razón válida para vomitarme yo también.
Y nada, me fui al trabajo y todo con la normalidad del caso. "Señora, ¿cómo son sus heces: duras, redondeadas y oscuras?", "Mamá, ¿cuántos pañales diarios ensucia su hijo?", "¿Le sale algún líquido de su vagina?", "¿Ha notado pus en la zona de la incisión?"...
Para acabar el día, en la zona en la que trabajo siempre hay un indigente sentado en una silla de ruedas. Su piel está morada de llevar sol y a veces cuando paso cerca de él en la parada, murmura algo entre dientes que bien suena como una madreada. Como sea, la vara es que en cuando me enrumbaba a la segunda parte de mi periplo autobusístico, vi la silla de ruedas sola al lado de un campo de zacate. Sabía que el señor debía estar por ahí y despistadamente husmeé en los alrededores. Un poco más cerca de donde yo estaba, se hallaba una chaqueta grande y gris tirada en el suelo... Unos metros más allá el pobre hombre caído y como muerto. Hice intentos de acercármele pero observé una mancha café misteriosamente ubicada en la camiseta blanca del susodicho me persuadió de lo contrario. Así las cosas, hice las del Melquíades y hui por la derecha.
Sé que soy un ser humano realmente detestable que debió anteponer su asco excepcional con tal de socorrer a su semejante pero en circunstancias como esta, pero no es menos cierto que en tal envergadura no queda más que seguir al pie de la letra la canción de María Isabel.
A eso de las 8 de la noche fue a mi primer clase de yoga en la vida. En el momento estuvo fuerte pero tampoco fue la gran cosa. Eso sí, la sudada fue algo de otro mundo, como si tuviera un tubo en la coronilla. Al verme así y casi al final de la clase, la instructora me puso un pañito como con desinfectante al lado por lo que pensé que de seguro olía yo tan mal que tuvo que buscar algo para aplacar los hedores corporales. Lo que no sabía yo es que era un pedazo de tela con esencias para ayudar a relajarse (sí, soy un polo, ¿y qué?).
Y es que, díganme, después de semejante jornada tan llena de fluidos corporales de tan variada procedencia, ¿quién iba a culparme?
Yo, por mi parte y como siempre, llegué como desesperado buscando un lugar con tal de no irme de pie. Obviamente, ni me percaté del tema y me senté en el primer asiento disponible (lamento desilusionarlos, pero no me senté en la regurgitación ni en sus cercanías). Pasaron los minutos y yo como si nada. De repente, percibí un olor a rancio pero no le presté importancia dado que cuando uno pasa mucho tiempo en el transporte público su nariz se vuelve inmune a los tufos de procedencia desconocida.
Fue gracias al delirio de confite Frutini de una señora que me di cuenta de lo que acontecía. Bueno, a eso y a que dijo: "Fulanita, cuidado se para en el papel que está en el pasillo". Más claro ni el agua.
Pues bueno, en este entonces faltaban 3 paradas para llegar a mi destino (lo cual, en términos del autobús de Palmares no significa ni 2 km) y no encontré razón válida para vomitarme yo también.
Y nada, me fui al trabajo y todo con la normalidad del caso. "Señora, ¿cómo son sus heces: duras, redondeadas y oscuras?", "Mamá, ¿cuántos pañales diarios ensucia su hijo?", "¿Le sale algún líquido de su vagina?", "¿Ha notado pus en la zona de la incisión?"...
Para acabar el día, en la zona en la que trabajo siempre hay un indigente sentado en una silla de ruedas. Su piel está morada de llevar sol y a veces cuando paso cerca de él en la parada, murmura algo entre dientes que bien suena como una madreada. Como sea, la vara es que en cuando me enrumbaba a la segunda parte de mi periplo autobusístico, vi la silla de ruedas sola al lado de un campo de zacate. Sabía que el señor debía estar por ahí y despistadamente husmeé en los alrededores. Un poco más cerca de donde yo estaba, se hallaba una chaqueta grande y gris tirada en el suelo... Unos metros más allá el pobre hombre caído y como muerto. Hice intentos de acercármele pero observé una mancha café misteriosamente ubicada en la camiseta blanca del susodicho me persuadió de lo contrario. Así las cosas, hice las del Melquíades y hui por la derecha.
Sé que soy un ser humano realmente detestable que debió anteponer su asco excepcional con tal de socorrer a su semejante pero en circunstancias como esta, pero no es menos cierto que en tal envergadura no queda más que seguir al pie de la letra la canción de María Isabel.
A eso de las 8 de la noche fue a mi primer clase de yoga en la vida. En el momento estuvo fuerte pero tampoco fue la gran cosa. Eso sí, la sudada fue algo de otro mundo, como si tuviera un tubo en la coronilla. Al verme así y casi al final de la clase, la instructora me puso un pañito como con desinfectante al lado por lo que pensé que de seguro olía yo tan mal que tuvo que buscar algo para aplacar los hedores corporales. Lo que no sabía yo es que era un pedazo de tela con esencias para ayudar a relajarse (sí, soy un polo, ¿y qué?).
Y es que, díganme, después de semejante jornada tan llena de fluidos corporales de tan variada procedencia, ¿quién iba a culparme?
sábado, 4 de julio de 2009
Tatuaje
tatuaje.
1. m. Acción y efecto de tatuar.
tattoo (DECORATION)
1. a permanent image, pattern or word on the skin which is created by using needles to put colours under the skin.
tatouage
1. action de tatouer, de dessiner sur le corps en introduisant des matières colorantes sous la peau au moyen de piqûres.
tatuaggio
(s.m.).
1. disegno indelebile tracciato sulla pelle mediante iniezioni di sostanze coloranti o con altri procedimenti.
No crean que soy políglota, no. Para eso existen Google y los diccionarios en línea (además, intenté buscarlo en alemán, pero me resultó tan enredado y tenía tan poca idea de lo que decía que preferí no pelarme el nance). A lo que me refiero es a que no importa el idioma un tatuaje bien hecho y en el lugar adecuado puede elevar grandemente el sexapil de una persona. ¿No creen?
Me ha venido dando vueltas en la cabeza hacerme uno, pero varias dudas asaltan mi mente:
- ¿Qué pasará cuando sea viejo y arrugado como una pasa?, ¿acaso no me vería ridículo?
- ¿Cómo hago para sobrellevar mi pánico a las agujas cuando el procedimiento las requiere en todo momento?
- ¿Cuál sería el lugar más adecuado para que un mae se haga un diseño?
viernes, 3 de julio de 2009
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